Cutini abrió la cajeta de pandora... Y, tal vez, quede abierta para siempre. Vean, pues, al mismísimo compañero Amperio, altivo en su manosantismo y algo ubaldinizado, el día de su egreso del Jardincito Peronista.
Juntos, pero no mezclados, Cutipé, Angusito, Criminacho y el Amperio, también conocidos como "El Cuarteto Mandarineta" celebran la vigilia pascual orquestados y disonantes, al tiempo que entonan villancicos de doble sentido de música simple y verso cordial. Imponente aunque algo esquivo, Cutipé arrancó aplausos con su solo de balbuzarda rítmica. Sonriente y codornizado, el contracanto barranquero de Angusito horadó la vigilia pascualera con sus polcas ucranianas más sentidas. Y, por su parte, Criminacho y el Amperio brillaron con sus respectivas interpretaciones de járcumbia en muzardina de crochét y teclado ouija trapezoidal. Que se repita la tenida, muchachos...!!!
Era mi ídolo, Cutipé. Después de Firulete, de Santiaguito y de Derridá, venía Ud. Venía, incluso, antes de Cañito y de Carlitosescaziotta. Me rompió el corazón de niño polivalente. ¿A dónde iremos a parar? Esto no es serio, Cutipé. Esto no es nada serio, ché.
Y quiero correr por ahí mientras trepo un cometa y levantarle la falda a la gorda del barrio. Quiero vivir sin guión ni la misma receta. Quiero inventarle otra letra al abecedario Quiero olvidarme de ti, Quiero saber que es por mí. Te quiero y no puedo querer mientras siga queriendo; inútil creer que querer es lograr olvidarte. Quiero encontrar otro amor y perderlo enseguida para olvidarme de ti para toda la vida....
Maternal, indigente y un tanto tamborilera, Pedepáu intenta convencer al bueno de Angusito de que casi todo es frustrante y sinsaboresco en el sufrido deporte de la pesca en arena, mientras Nanook deja entrever la mirada sibilina y belicosa de filipino enjaulado que tanto daño le hace al fútbol argentino. A lo lejos y empequeñecido por el plano fotografial, Partuso el obtuso estrena chaleco de nutria overa y bastonea sin sentido alguno.